Los colines de nueva generación de Puig destacan por su diseño agresivo y por su atractivo a la hora de dejar la parte posterior de la moto única y exclusivamente preparada para el piloto.
Al convertir la moto en monoplaza, se le otorga una estética personalizada y deportiva, creando semejanza con las motos de competición.
Su estudiado diseño tiene como objectivo aligerar la parte posterior, simplificando las líneas de la moto. Además, en la zona delantera del colín incorporamos una espuma de neopreno de 4mm de espesor en color negro, para mejorar el confort del piloto cuando se resguarda a altas velocidades.
Diseñado y fabricado cerca del Circuito de Catalunya en Montmeló, Barcelona, esta pieza está hecha en plástico ABS negro mate, negro brillante o en resistente y ligero símil de carbono de 3mm de grosor.
Su montaje es muy sencillo ya que la tapa del colín Puig usa el mismo sistema de anclaje, o parecido, para que el montaje de colín sea lo más simple posible.
Los colines Puig, dependiendo del modelo, incluyen un kit de adhesivos para no perder los colores de la moto con el producto instalado.
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