Las preciosas y trabajadas calaveras mexicanas son objeto de culto en su tradición, un recordatorio de los seres queridos que ya no están entre nosotros. En su cultura se celebra la muerte de forma muy distinta a lo que estamos acostumbrados, dejando de lado la pena y la autocompasión. Algo parecido sucede con el estilo de vida sobre la moto, centrado en la libertad y el disfrute. ¿Qué mejor idea que unir ambos conceptos?
Esta calavera blanca en tonos rojizos y naranjas le dará el toque moderno y juvenil a tu depósito pero también lo mantendrá como el primer día. Gracias a su fabricación en plástico flexible de alta calidad podrás adaptarlo a tu moto, sea cual sea. El material protegerá el depósito ante cualquier rozadura de la chaqueta y su durabilidad está asegurada, incluso si la estacionas en la calle.